LA DOCTRINA DE LA SANTISIMA TRINIDAD

 

La doctrina de la trinidad es mal entendida y presentada erróneamente, pues el vocabulario que se utiliza humanamente es limitado para describir a un Dios Trino y uno, lo cual lleva a error de pensar en un “triteísmo” y no en un Solo Dios que en su unidad divina son tres personas. Al poner énfasis en la deidad de Cristo, y a la personalidad del Espíritu Santo, algunos escritores caían en el error “triteísta”; otros al recalcar la unidad de Dios corrían el peligro de olvidad la distinción entre las personas de la Trinidad. Esto produjo el surgimiento del “modalismo” o “sabelianismo”, más conocido como la doctrina “unitaria” o “Jesús solo”. Por esta razón es que debemos enfatizar mucho más sobre el estudio de la Trinidad para no dejarnos engañar por esta corriente herética del unitarismo, Myer Pearlman dice lo siguiente:

 

“El Padre ama y envía la Hijo; el Hijo parte y retorna al Padre. El padre y el Hijo envían al Espíritu Santo; el Espíritu Santo intercede ante el Padre. Si entonces el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son Dios sólo bajo diferentes aspectos (modos) o nombres, luego el Nuevo Testamento es una serie de confusiones. Por ejemplo al leer la oración intercesora de Juan 17 con la idea de que el Padre, el hijo y el Espíritu Santo son una sola persona (y no una Trinidad), revelará lo absurdo de la doctrina, pues diría más o menos así: “Como me he dado la potestad de toda carne, para que yo dé vida eterna a todos los que me di… Yo me he glorificado en la tierra, he acabado la obra que me di a mí mismo con la gloria que tenía conmigo antes que el mundo fuese”.

           

Al ver la oración de Jesús en Juan 17, bajo la observación  del Myer Pearlman, nos damos cuenta de que los “unitarios” simplemente creen que el Señor era un lunático que le oraba a un Padre que no existía, o se estaba orando a sí mismo, lo cual es un verdadero absurdo de la doctrina del unitarismo. La doctrina de la Trinidad fue preservada y protegida del “sabelianismo” y del “triteismo” (vea el capítulo sobre los sistemas antitrinitarios) mediante la formulación del dogma, llamado también el Símbolo de Atanasio, formulado durante el siglo V, con el fin de proteger la Iglesia y la doctrina Trinitaria. El símbolo de Atanasio dice de la siguiente manera:

 

“Adoramos un Dios en la Trinidad, y la Trinidad en la unidad, sin confundir la personas, ni separar la sustancia, puesto que la persona del Padre es una, y la del Hijo otra, y la del Espíritu Santo otra. Pero del Padre, y del hijo, y del Espíritu Santo hay sólo una divinidad, igual gloria y majestad coeterna. Lo que es el Padre, también lo es el Hijo y el Espíritu Santo. El Padre es increado, el hijo es increado, el Espíritu Santo es increado. El Padre es inmenso, el hijo es Inmenso, el Espíritu Santo es inmenso. El padre es eterno, el Hijo es eterno, el Espíritu Santo es eterno. Sin embargo, no hay tres eternos, sino sólo uno. De manera que no hay tres seres increados, ni tres seres inmensos, sino un solo ser increado, un solo ser inmenso. De igual manera el Padre es omnipotente, el Hijo es Omnipotente, el Espíritu Santo es Omnipotente. Sin embargo, no hay tres eres omnipotentes, sino un solo ser Omnipotente. De manera que el Padre es Dios, el Hijo es Dios, el Espíritu Santo es Dios. Sin embargo no hay tres Dioses, sino un solo Dios. De igual manera el Padre es Señor, el Hijo es Señor, el Espíritu Santo es Señor. Sin embargo, no hay tres Señores, sino uno sólo. Así como nos vemos obligados en honor a la verdad cristiana de afirmar que cada una de las personas particularmente es Señor o Dios, así también nos vemos imposibilitados de decir que hay tres Dioses o Señores. El Padre no fue hecho de nadie, no fue creado, no fue engendrado. El hijo Salió del Padre; no fue hecho, ni creado, sino engendrado. El Espíritu Santo salió del Padre y del Hijo, no fue hecho, ni creado, ni engendrado, sino que procede de ellos. Por o tanto, hay un solo Padre y no tres; un solo Hijo, y no tres; un solo Espíritu Santo, y no tres. Y en esa Trinidad no hay nada primero ni postrero; nada mayor o menor. Pero las tres personas co-eternas son co-iguales o mutuamente iguales entre sí; de manera que a través de todo, como se ha dicho arriba, tanto la unidad en la Trinidad como la Trinidad en la unidad deben adorarse”

 

Hay un solo Dios, pero en la unidad de la divina esencia hay tres personas co-eternas e iguales en todo, de la misma sustancia, pero distintas en la subsistencia. Palabra compuesta de Tres y Unidad=Tri-unidad o Trinidad. Aunque la palabra “Trinidad” no se encuentra en la Biblia, es la palabra que mejor nos deja entender la forma “Tri-Partita” en la cual Dios existe según lo revelado en las Santas Escrituras. Dios no es un Dios de tres cabezas como dicen los “Testigos de Jehová”, ni es una “trilogía” de tres Dioses como dicen los Mormones. Dios es único y uno, que subsiste y se ha revelado al hombre en las personas del  Padre, el Hijo y El Espíritu Santo, tres personas,co-eternas, separadas pero siempre unidas, indepedientes pero enlazadas en todo, en propósito, en deseo y voluntad.

 

La enseñanza de la Trinidad es una que va mas allá del alcance de la mentalidad humana. La mente humana no puede percibir las cosas de Dios porque le son locura. El Misionero y Maestro Juan Wesley expreso lo siguiente: “Muéstrame una lombriz que pueda comprender al hombre, y yo te mostrare a un hombre que puede comprender a un Dios Trino”.  Isaías 55:8, lo expresa: “Mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni mis caminos vuestros caminos, dice el Señor. Porque como los cielos son mas altos que la tierra, Asi son mis caminos mas altos que vuestros caminos y mis pensamientos que vuestros pensamientos”.

 

La lógica humana simplísima no puede entender lo que Dios hace y como funciona. Cuando queremos aplicar lógica humana a Dios y su Palabra (La Biblia), nunca llegaremos a una conclusión verdadera porque la mente humana no entiende las cosas de Dios porque le son locura. El apóstol Pablo escribió: “Porque ahora vemos por espejo, oscuramente; mas entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido” (1 Corintios 13:12). Sin embargo, Dios se nos revela en la Biblia como Trino y Uno, pues nosotros tenemos al Espíritu Santo quien nos ilumina las Sagradas Escrituras, y nos provee entendimiento para comprender esta doctrina tan fundamental para nuestra fe cristiana.

 

 

ENTENDIENDO LAS PALABRAS PERSONA Y ESENCIA

 

   Persona: De Acuerdo a la enseñanza Bíblica cuando hablamos de “Persona”, no se hace esto en el mismo modo en que se hace cuando se habla del humano. Esta palabra encierra mas; las tres personas son inseparables, inter-dependientes, y eternamente unidas en un ser divino.

 

   Debe admitirse que la palabra “persona”, en ese sentido trinitario, no esta enteramente libre de objeción, pero parece cosa entendida por los escritores ortodoxos que no hay una palabra mejor. La objeción es que no puede aplicarse en su acepción común, esto es como se aplica a los seres humanos. Por ejemplo, persona, en el uso ordinario del término, significa un ser distinto e independiente; así es que una persona es un ser, y cien personas son cien seres. Pero en la Divinidad hay tres personas y UN SOLO SER.

 

   Esencia: La doctrina de la Trinidad establece que hay un solo Dios quien es uno en esencia o substancia, pero tres personas que son co-iguales, inseparables, interdepen-dientes, y eternalmete unidas en un ser y Esencia Divina.

 

LA DEIDAD DE LAS PERSONAS DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO

 

  • El Hijo (Cristo- Su Deidad).

 

    Probada por sus nombres: Dios: “Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo, cetro de equidad es el cetro de tu reino” (Hebreos 1:8). Hijo de Dios: “Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente” (Mateo 16:16; 26:61-64) Señor: “El le dijo: ¿Pues cómo David en el Espíritu le llama Señor, diciendo: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha, hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?” (Mateo 22:43-45) Rey de Reyes y Señor de señores: “Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: Rey de reyes y Señor de señores” (Apocalipsis 19:16).

 

    Probada por sus características (Atributos:) Omnipotencia: “Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra” (Mateo 28:18). Omnisciencia: “Le dijo Natanael: ¿De donde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo dela higuera, te vi” (Juan 1:48) Omnipresencia: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mateo 18:20) Vida: “En Él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres” (Juan 1:4). Verdad: “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6) Inmutabilidad: “Jesucristo es el mismo de ayer, y hoy, y por los siglos” (Hebreos 13:8).

 

    Probada por la adoración que le rinden (Al Señor tu Dios adoraras y a el solo servirás) Los Ángeles (Hebreos 1:6). Los hombres (Mateo 14:33). Todos (Filipenses 2:10).

 

    Probada por su igualdad en la Trinidad. Con el Padre: “yo y el Padre uno somos” (Juan 10:30; cf. Juan 14:23). Con el Padre y el Espíritu Santo: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19; cf. 2 Corintios 13:14).

 

  • El Espíritu Santo-Su personalidad.

 

    Probada por sus Características: Es inteligente: “Pero Dios nos las reveló a nosotros por el Espíritu; porque el Espíritu todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios. Porque ¿Quién de los hombres sabe las cosas del hombre, sino el espíritu del hombre que está en él? Así tampoco nadie conoció las cosas de Dios, sino el Espíritu de Dios” (1 (Corintios 2:10-11). Tiene sentimientos: “Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención” (Efesios 4:30). Tiene voluntad: “Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere” (1 Corintios 12:11).

 

    Probada por sus obras: Enseña: “Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordara todo lo que os he dicho” (Juan 14:26). Guía: “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios” (Romanos 8:14). Comisiona: “Ellos, entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, y allí navegaron a Chipre” (Hechos 13:4). Refrena: “Y dijo Jehová: no contenderá mi Espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne, mas serán sus días ciento veinte años” (Génesis 6:3). Intercede. (Romanos 8:26). Habla (Juan 15:26; 2 Pedro 1:21).

 

    Probada por lo que se le atribuye: Puede ser obedecido (Hechos 10:19-21). Se le puede mentir (Hechos 5:3). Se le puede resistir (Hechos 7:51). Se le puede reverenciar (Salmo 51:11). Se le puede blasfemar (Mateo 12:31). Se le puede entristecer (Efesios 4:30). Se le puede ultrajar (Hebreos 10:29). Se puede estorbar o impedir que actúe como el quiere en nuestras vidas y se le puede apagar (Tesalonicenses 5:19).

  • El Espíritu Santo-Su Deidad.

 

    Probada por sus nombres: Nombres que, en plano de completa igualdad, relacionan al Espíritu Santo con las otras personas de la Trinidad (1 Corintios 6:11). Nombres que lo muestran haciendo cosas que solo Dios puede hacer (Juan 14:16; Romanos 8:15). El Espíritu Santo es el Señor (2 Corinitos 3:17).

 

    Probada por sus características. (Posee atributos divinos): Omnisciencia (1Corintios 2:10-11). Omnipresencia (Salmo 139:7; 1 Corintios 6:19). Omnipotencia (Génesis 1:2). Verdad (1 Juan 5:6). Santidad (Lucas 11:13) Vida (Romanos 8:2). Sabiduría (Isaías 40:13).

 

    Probada por sus obras. (De obras que solo Dios puede hacer, se dice que son hechas por el Espiritu Santo): Crear (Génesis 1:2). Inspirar. (2 Pedro 1:21). Formar la naturaleza humana de Cristo (Lucas 1:35). Convencer a los hombres (Juan 16:8). Regenerar (Juan 3:5-6). Confortar y consolar (Juan 14:16). Interceder (Romanos 26-27).  Santificar (2 Tesalonicenses 2:13).

 

    Probada porque Su ser esta asociado, en plano de igualdad, con las otras personas de la Trinidad. (Mateo 28:19; Hechos 5:3-4; 2 Corintios 13:14).

 

LAS CARACTERÍSTICAS DE CADA PERSONA

DE LA TRINIDAD

 

El único Dios es una pluralidad de tres personas, o sea, la Divina Trinidad. Las tres personas que componen la Trinidad son: Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo. Cada miembro de la Trinidad posee los atributos que solamente pueden pertenecer a Dios, y hacer obras que solamente Dios puede hacer.

 

  • Cada uno tiene los atributos de Dios.

 

    Santo: Solamente Dios puede ser santo: es decir, completamente separado del pecado y positivamente puro y perfecto. Dios el Padre es Santo (Mateo 5:48). Dios el Hijo es Santo (1 Juan. 3:5; Hebreos 7:26). Dios el Espíritu es Santo. Muchas veces en la Biblia es llamado el Espíritu Santo (Mateo 1:18; 3:11; 28:19).

 

    Eternal: Solamente Dios es eterno. Quiere decir que no tuvo principio, ni tendrá fin. Dios el Padre es eterno (Génesis 21:33). Dios el Hijo es eterno (Miqueas 5:2; Juan 1:1; Colosenses 1:17). Es el Hijo de Dios Padre desde la eternidad. Dios el Espíritu es eterno (Hebreos 9:14).

 

    Omnipotente: Solamente Dios puede tener todo poder.  Dios el padre es todopoderoso (Éxodo 6:2-3).  Dios el Hijo es todopoderoso (Mateo 28:18; Hebreos 1:1-3).  Dios el Espíritu es todopoderoso (Lucas 1:35). El poder del Altísimo es el poder del Espíritu Santo.

 

    Omnipresente: Significa que está presente en todas partes al mismo tiempo. Dios el Padre es omnipresente (Jeremías 23:24). Dios el Hijo es omnipresente (Juan 3:13). Aún cuando estaba en cuerpo en la tierra, estaba también en el cielo (Mateo 18:20; Colosenses 1:27).  Dios el Espíritu es omnipresente (Salmo 139:7-12).

 

   Omnisciente: Quiere decir que sabe todo, del pasado, del presente, y del futuro. Dios el Padre es omnisciente (Salmo 139:1-6). Dios el Hijo es omnisciente (Juan 2:24-25; Col. 2:2-3). Dios el Espíritu es omnisciente (1 Corintios 2:10-11; Juan 14:26; 16:12-13). Vemos que el Espíritu conoce las cosas de Dios y puede enseñar todas las cosas.

 

  • Cada uno ejecuta las obras de Dios.

 

    La Creación: Solamente Dios puede crear. Dios el Padre es creador (Génesis 1:1; 2:4). Dios el Hijo es creador (Juan 1:1-3; Hebreos 1:1-2). Dios el Espíritu es creador (Génesis 1:2; Job 33:4; Salmo 104:30).

 

    La Salvación: Solamente Dios puede salvar. Dios el Padre amó al mundo y envió el Salvador (Juan 3:16; 1 Juan 4:14). Fue provisto por Él. Dios el Hijo es el Salvador. Pagó el precio de la salvación con su sacrificio en la cruz. Dios el Espíritu regenera a los que creen en Cristo Jesús (Juan 3:3-5).

 

DISTINTIVOS DE LAS PERSONAS DE LA TRINIDAD

 

    No se confunden: En acuerdo pues, hay lo que en el Hijo le constituye Hijo y no el Padre y hay lo que el Espíritu Santo le constituye como Espíritu Santo y no el Padre ni el Hijo.

 

 

    Sus Funciones: El Padre es quien engendra, el Hijo el engendrado y el Espíritu Santo es aquel que procede del Padre y del Hijo. Por cuanto estas tres personas en la Deidad están en perfecta unidad, hay un solo Dios Todopoderoso y uno es su nombre (Zacarías 14:9; Juan 1:18, 15:26). El Padre destina la salvación al hombre, El Hijo salva y perdona por su sangre y el Espíritu Santo Santifica (Pedro 1:2).

 

    Identidad y cooperación de la Deidad: El Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo nunca aparecen idénticos en cuanto a persona, ni confundidos en cuanto a parentesco, ni divididos en cuanto a la Deidad, ni opuestos en cuanto a cooperación. El Hijo está en el Padre y el Padre en el Hijo, en cuanto a relación. El Padre no procede del Hijo, pero el Hijo procede del Padre, en cuanto a autoridad. El Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo en cuanto a naturaleza, parentesco, cooperación y autoridad. Ninguna de las tres personas en la Deidad obra o existe separada o independiente de las demás (Juan 5:17-30, 32).

 

    Concluyo diciendo que es verdad que el hecho de la doctrina de la Trinidad —lo tenemos que confesar— sobrepasa a nuestra comprensión, pues no se conoce nada comparable en el mundo de nuestra experiencia que saber que Dios es tan infinitamente inmenso y Poderoso que nuestra mente humana no lo puede describir a la perfección, sin querer decir que Dios no se ha revelado al hombre. Pero el hecho de que la doctrina de la Trinidad este por encima de nuestra comprensión, no quiere significar que este en contra de nuestra razón. La Palabra de Dios es muy clara y afirma contundentemente que Dios es Uno y Trino ¡Aleluya!

 

Tomado del Libro: Dios en Tres Personas. Un estudio Bíblico sobre la Trinidad. Pastor: Jimmy Salazar Vallejo. Ediciones Filadelfia.

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