CÓMO ENFRENTAR EL MUNDO

 

TEXTO BÍBLICO: 1 Juan 2:15-17.

 

 

La mejor manera de vivir la vida cristiana es vivir apartado del mundo y consagrado para Dios. Cuando hablamos de “mundo” no nos estamos refiriendo al planeta donde estamos parados, sino al sistema que gobierna a la humanidad, el cual es un sistema lleno de pecado, maldad, idolatría, carnalidad, sexo, vicios, y desobediencia a la voluntad de Dios. Lamentablemente muchos cristianos han fracasado en su vida cristiana por no abandonar el mundo y sus costumbres del todo, sino que tienen todavía un pie en la iglesia y otro en el mundo. De esta manera aman más al mundo que a Dios, y debe ser al contrario: se debe aborrecer al mundo y amar a Dios.

 

I.          ¿QUE ES EL MUNDO?

 

     Mundo: El mundo representa todo aquello que desagrada a Dios, y por consiguiente ata al creyente para que no haga la voluntad de Dios. el mundo es la filosofía, los conceptos y doctrinas falsas que denigran de Jesucristo, mostrando un camino de salvación diferente.

 

    Deseos de la carne: Son aquellos que están por naturaleza en nosotros y nos impulsan a hacer lo malo incitándonos, aun desde niños, a seguir lo que la carne quiere. Los deseos de la carne es el impulso que siente nuestro cuerpo por buscar todo aquello que desagrade a Dios, cosas que nos hacen pecar y nos destruyen espiritualmente.

 

    Deseos de los ojos: Los ojos son la principal puerta de la tentación. Los ojos pueden serla fuente de la pureza, o por el contrario, pueden ser la inspiración o instrumento para que la maldad entre a nuestra vida.

 

    Los deseos de los ojos, como se dice vulgarmente, pueden describirse como un goce morboso, mal intencionado y egoísta que incluye solo el ver todo aquello que conlleva al pecado. Los ojos incluyen la mente y la imaginación para poder codiciar el pecado.

  • Los ojos pueden codiciar hasta llevar a una persona al adulterio (Mateo 5:27-28).
  • Los ojos sin consagrar están cargados de lascivia, la cual despierta deseos impuros.
  • Los deseos de los ojos contaminan la mente, pues trata de satisfacer la carne a través de la pornografía, literatura inmunda, y películas que no edifican.
  • Los deseos de los ojos hace de una persona adicta al pecado y la lujuria y solo es saciada satisfaciendo los deseos de la carne.
  • Los ojos carnales cuando contemplan el pecado le dice a la mente: “No tiene nada de malo”, “todo el mundo lo hace”, “no te vuelvas fanático”.
  • Los deseos de los ojos manipulan nuestra mente, apagan al espíritu Santo, nos alejan de Cristo y nos lleva al infierno.

 

    Vanagloria de la vida: Es una filosofía mundana que solo cree que el sentido de la vida se encuentra en la apariencia y en el aprecio de las cosas, y no en el valor que Dios le ha dado. La vanagloria de la vida hace de las personas seres superficiales, egoístas y vanidosos.

 

II.       CÓMO ME AFECTA EL MUNDO:

 

    Cuando cedo a sus caprichos: La falta de dominio propio de una persona que le da pena decir que es cristiano delante de sus amigos, hace que simplemente ceda a los caprichos del mundo. Dios no nos ha dado espíritu de cobardía, sino de dominio propio (2 Timoteo 1:7).

 

    Cuando acepto el lenguaje obsceno del mundo: Por lo regular, cuando un creyente no se aparta de las amistades pecaminosas, tiende a aceptar, adoptar y repetir lo que los impíos dicen y hacen, de ahí la importancia que un creyente sea radical con el mundo, y sepa de ahora en adelante rodearse de amistades netamente cristianas que le ayuden en su vida espiritual.

 

    Cuando escucho música mundana: La música es un instrumento que el diablo está utilizando para destruir a la humanidad. Sin embargo, la música fue creada por Dios para alabanza y adoración suya. Si usted como cristiano todavía escucha la música que antes escuchaba cuando estaba en el mundo, su crecimiento espiritual estará estancado, pues la música mundana ata a la personas mental y espiritualmente.

 

    Cuando frecuento lugares donde reina el pecado: si usted como cristiano quiere crecer en su vida espiritual y como creyente, debe renunciar a los lugares que a Dios le desagradan. Ya no puede frecuentar los sitios de rumba y carnalidad que le van a enviar de nuevo a la perdición.

 

    Cuando sostengo relaciones fuera de la voluntad de Dios: Otro factor por el cual el mundo afecta a muchos, es porque no han roto con relaciones impías que no están dentro de la voluntad de Dios. Cuando un creyente sostiene relación con un inconverso (a no ser que ya estén casados) no puede crecer en los caminos de Dios, pues el inconverso le demandará y obligará que deje a Dios y no vuelva a la iglesia. Recuerde que la palabra de Dios dice: “El mundo pasa y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios, permanece para siempre” (1 Juan 2:17).

 

III.    CÓMO ENFRENTO EL MUNDO:

  • No participe en lo que el mundo le ofrece.
  • Abandone los lugares que desagradan a Dios.
  • Rompa objetos, fotos, música, entre otras cosas que le ataban al mundo y al pasado pecaminoso.
  • Sea radical en su posición como creyente frente a las antiguas amistades y frente al pecado.
  • Evite pasar mucho tiempo con incrédulo e impíos, recuerde que ellos lo incitaran nuevamente a que vuelva a pecar.
  • Busque amistades cristiana dentro de la iglesia que le ayuden a crecer espiritualmente.
  • Afiance su relación con Dios en oración.
  • Ayune para que pueda romper ataduras del pasado que quieran gobernar su vida nuevamente.
  • Asista a la iglesia a todos las celebraciones para que pueda crecer espiritualmente y pueda alabar a Dios en Espíritu y en verdad.